JESUS MARIA, AGS.- Un vicioso asesinó a un octogenario de dos heridas que le provocó con un cuchillo en el cuello y el pecho, en un predio arbolado en Loma de Maravillas, en este Ayuntamiento, según él porque sorprendió al adulto mayor robando unos elotes de un terreno propiedad de uno de sus primos.
El asesinado fue identificado como Secundino Sandoval Romo, contaba con 89 años de edad, era soltero y vivió en la avenida Guadalupe número 218 de la colonia Corral de Barrancos, Jesús María.
El vicioso que lo asesinó, adicto al cemento industrial, dijo llamarse Efrén Martínez Villalobos (a) "El Lagrimita" y/o "El Güero", de 29 años y vecino de la calle Loma de Maravillas número 100 en la población del mismo nombre.
El homicidio ocurrió el jueves 25 de octubre, alrededor de las cuatro y media de la tarde, en un predio rústico en las inmediaciones de Loma de Maravillas, cerca del cauce del Río San Pedro.
De acuerdo a lo dicho por Efrén, ese día, a las 07:15 horas, salió de su vivienda para ir a cortar caña de maíz en el predio de su primo Roberto "N", de 35 años, en la población referida.
En ese lugar estuvo hasta las 10 de la mañana ya que fue a su casa a almorzar y regresó una hora después, observando que un individuo, presuntamente Secundino, salía de una milpa con unos elotes en sus manos, por lo que le dijo que los dejara, que no se metiera a robarlos y que mejor se retirara.
El adulto mayor se retiró y Efrén fue a informarle a su primo lo sucedido, por lo que éste le pidió que le cuidara el terreno y que hiciera guardia toda la tarde.
A las 15:00 horas, "El Lagrimita" fue a su casa a comer y antes de volver al predio, tomó un cuchillo de cocina para usarlo para defenderse en caso de ser necesario mientras cuidaba el terreno de su primo.
Al lugar retornó a las 16:30 horas y al regresar, de nueva cuenta, al parecer, volvió a ver al adulto mayor saliendo de la milpa con elotes en sus manos, por lo que le dijo que si no había entendido y que mejor se retirara.
Según el dicho de Efrén, el hombre se le fue encima y lo golpeó con los puños, por lo que le indicó que se retirara ya que no quería problemas, pero como siguió agrediéndolo, entonces sacó el cuchillo que llevaba y con éste le tiró dos golpes, uno en el cuello y otro en el pecho del lado derecho.
El octogenario sufrió sendas heridas y cayó al piso boca arriba, por lo que se desangró y murió.
No obstante, Efrén aseguró que el hombre le quitó el cuchillo y con éste le tiró tres golpes, pero que no lo lesionó ya que traía puestas dos sudaderas y un jersey.
Al ver que el octogenario ya no se movía, se retiró unos metros y comenzó a drogarse con cemento industrial, tras de lo cual se quitó los tenis que calzaba y los fue a tirar, así como el cuchillo.
Posteriormente, el cuerpo del agredido fue descubierto por una mujer de nombre Altagracia Martínez, que le fue a avisar a su suegro Francisco Martínez Suárez, de 65 años, papá de Efrén, que acababa de llegar a su casa y estaba viendo la televisión.
Al salir hacia el predio, confirmó que un hombre estaba tirado en el suelo, por lo que se comunicó al servicio de emergencia 066 para reportarlo.
Al lugar acudieron los paramédicos del ISSEA en la ambulancia ECO-158, que revisaron al hombre y confirmaron que ya había fallecido, observándole heridas en el cuello y el pecho.
Al sitio también llegaron los policías preventivos jesusmarienses, que encontraron a Efrén tratando de ocultarse entre los árboles, por lo que lo detuvieron, aceptando haber atacado al octogenario con el cuchillo, pero argumentó que lo hizo para defenderse ya que éste lo golpeó primero.
A pesar de ello, fue puesto tras las rejas acusado por homicidio.
El Ministerio Público se presentó en el sitio para dar fe de los hechos y elementos de Servicios Periciales levantaron el cuerpo del fallecido para trasladarlo al SEMEFO.
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