- La víctima, que no había sido identificada, tenía los pantalones abajo; fue hallada en la comunidad El Niágara por un jornalero
AGUASCALIENTES, AGS.- Un hombre que no ha sido identificado hasta el momento, fue asesinado de varias puñaladas en el pecho y cuyo cuerpo, en avanzado estado de putrefacción, fue tirado en un monte en las inmediaciones de la comunidad El Niágara, al sur-poniente de la capital.El cadáver fue encontrado la tarde del martes 29 de mayo y con los pantalones abajo y aunque la víctima no había podido ser reconocida, trascendió que era como de 40 a 50 años de edad.
De manera extraoficial también se dijo que tendría de un mes a un mes y medio de haber fallecido, aunque por haber estado expuesto a la intemperie, se pudo haber acelerado la descomposición de su cuerpo.
A raíz de la no identificación del occiso, las autoridades ministeriales desconocían quién o quiénes lo asesinaron y los motivos por los que lo hicieron, aunque ya realizaban las investigaciones correspondientes.
Al parecer, no había reportes de personas extraviadas en la Policía Ministerial y por las condiciones en las que se halló el cuerpo, se complicó su identificación.
El hallazgo fue hecho alrededor de las dos de la tarde por un jornalero que sacó a pastar sus vacas, las que llevó a un terreno ubicado cerca de la comunidad El Niágara, sobre la carretera estatal 42 y el libramiento a Calvillo.
El jornalero (no identificado) condujo a sus animales hasta un monte y durante el recorrido que hizo, entre unos árboles observó un bulto que le llamó la atención, por lo que se acercó pensando que podría tratarse de un animal, pero al estar próximo constató que se trataba del cuerpo de una persona.
El jornalero sufrió una desagradable impresión y se sintió mal de salud, por lo que decidió regresar a su casa. Al llegar, enteró a su hijo de lo que había visto y le pidió que volviera al sitio y diera aviso a las autoridades, indicándole el lugar exacto donde se encontraba el cadáver.
El hijo se trasladó al monte en una camioneta Ford Ranger, tipo Pick-Up, color azul y llamó a los servicios de emergencia, presentándose oficiales de la Policía Preventiva , que constataron la existencia del cuerpo y acordonaron la zona.
Posteriormente, arribaron el Ministerio Público, agentes del grupo Homicidios y elementos de Servicios Periciales, que iniciaron las pesquisas.
El cuerpo lo encontraron escondido entre unos árboles, boca arriba, dándose cuenta que tenía los pantalones abajo y que se hallaba en avanzado estado de putrefacción, muy "hinchado" y ennegrecido.
Además, vieron que tenía el brazo derecho flexionado hacia la cabeza y en la axila se le apreció un nido de fauna cadavérica, en una escena espantosa.
Una vez que terminaron las diligencias de ley, el cuerpo fue levantado y trasladado al Servicio Médico Forense, donde comenzó a ser revisado más minuciosamente, por lo que más tarde se logró conocer que fue en este chequeo cuando los médicos legistas le detectaron varios cortes (heridas) en el pecho, provocados por un arma blanca.
De esta manera, se concluyó que el hombre fue asesinado a puñaladas y su cadáver tirado en el monte, siendo escondido entre unos árboles para que no fuera descubierto con facilidad.
Los especialistas presumieron que tenía entre un mes y un mes y medio de haber muerto, por el avanzado estado de descomposición que presentaba el cuerpo.
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