* A balazos mató a su tío (que se burlaba de él y lo humillaba) y lesionó a otro individuo en Iowa en el 2008
* Se ofrecía una recompensa de 500 dólares por su captura
* Fue ubicado en la colonia Insurgentes, donde vivía con su familia
AGUASCALIENTES, AGS.- Tres años y dos meses después de que asesinó a su tío a balazos e hirió a otro individuo en Iowa, Estados Unidos, un sujeto que formaba parte de la lista de los fugitivos más buscados en dicha localidad americana y se ofrecía una recompensa de 500 dólares por su captura, fue detenido por agentes de la Policía Ministerial en la colonia Insurgentes.
Se trata de Mario Guerrero Cordero, vecino de la calle Luis Moya de dicha colonia, en contra de quien pesaba una orden de aprehensión por los delitos de homicidio en primer grado e intento de homicidio girada por la Corte de Distrito del Condado de Polk County.
A quien asesinó fue a su tío Miguel Cano Basurto, de 32 años e hirió a Héctor Casillas, en hechos ocurridos el viernes 4 de julio del 2008 en un taller de hojalatería al noreste de la ciudad de Des Moines, en el referido Condado de Polk County.
Los tres involucrados trabajaban en dicho taller y, aparentemente, Mario estaba resentido contra su tío debido a que éste se burlaba de él y lo humillaba por ser ilegal, lo cual hizo en varias ocasiones.
El día mencionado, Mario tomó un arma de fuego calibre 9 milímetros que tenían en el taller y cuando Miguel comenzó a insultarlo, le disparó en varias ocasiones para matarlo, aunque los proyectiles también hicieron blanco en la humanidad de Héctor.
Luego de lo anterior, Mario escapó y decidió regresar a México, concretamente a Aguascalientes, quedándose en su casa con su familia.
Tras la agresión, Miguel fue auxiliado y llevado a recibir atención al Centro Médico Mercy, a donde llegó ya sin vida, mientras que Héctor fue trasladado por sus familiares al Hospital Luterano, donde fue atendido de heridas de bala que presentaba en el abdomen y en una pierna.
Otros trabajadores del taller, al escuchar los balazos, se asomaron a ver qué ocurría y al ver heridos a Miguel y Héctor, dieron parte a la Policía local, aunque Mario, el agresor, logró escapar, por lo que se le declaró fugitivo, se le emitió una orden de captura y se ofreció una recompensa de 500 dólares por su captura.
Las autoridades de Iowa establecieron que el asesino estaba refugiándose en Aguascalientes, en específico en la colonia Insurgentes, por lo que solicitaron la colaboración de INTERPOL México para su detención.
Esta dependencia, a su vez, pidió el apoyo de la Policía Ministerial, por lo que varios agentes investigadores se trasladaron a dicho lugar y lo capturaron, llevándolo al edificio de la corporación, hasta donde arribó el personal de la INTERPOL para recibirlo y llevarlo de regreso a Estados Unidos para que responda por el crimen de su tío y las lesiones a la otra víctima.
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