- Le dieron el tiro de gracia en un predio y luego le prendieron fuego al estar amarrado de pies y manos
AGUASCALIENTES, AGS.- Un joven fue ejecutado de un balazo en la cabeza y luego sus victimarios le prendieron fuego para calcinarlo por completo, en un camino de terracería en la comunidad San Antonio de Peñuelas, al sur de la capital.
La víctima, que no ha sido identificada, se encontraba amarrada de pies y manos y de acuerdo a los indicios recabados por las autoridades ministeriales, fue privada de la vida en el mismo sitio en donde fue encontrada.
El occiso aparentaba una edad de 21 años y vestía playera en color blanco y pantalón azul de mezclilla.
El hallazgo de su cuerpo fue hecho al filo del mediodía del miércoles 13 de septiembre por una mujer, que buscaba a unas vacas extraviadas en un predio conocido como La Tortuga y el cual, en ocasiones, era utilizado para realizar días de campo.
La fémina caminaba por el lugar cuando en determinado momento descubrió un bulto tirado en el piso, por lo que decidió aproximarse para ver de qué se trataba.
Al hacerlo, se dio cuenta que se trataba del cuerpo de un hombre que yacía en el suelo, boca abajo, y estaba totalmente calcinado, por lo que se alejó para ir a dar parte a los servicios de emergencia.
Al lugar se trasladaron de inmediato policías municipales y estatales, que se encontraron con la testigo en el referido camino de terracería, que conduce de San Antonio de Peñuelas al aeropuerto internacional "Jesús Terán Peredo".
La mujer los condujo hasta el sitio donde se hallaba el cuerpo, por lo que los uniformados constataron que estaba calcinado y le apreciaron una herida de bala en la cabeza, catalogada como "el tiro de gracia".
Además, constataron que tenía las manos amarradas a la espalda con un alambre, así como los pies.
Por lo anterior, decidieron acordonar el área para proteger el escenario de los hechos y esperaron la intervención de las autoridades ministeriales.
Momentos después arribaron agentes de la Policía Ministerial y elementos de la Dirección de Investigación Pericial, que se encargaron de realizar algunas diligencias, entre ellas el levantamiento de indicios.
Al recoger el cadáver, en el piso detectaron sangre y las huellas de la calcinación, por lo que se presumió que el joven fue ejecutado y quemado en ese mismo punto.
El cuerpo fue trasladado al Servicio Médico Forense para la práctica de la necropsia de ley para determinar las causas y el tiempo de muerte.
A la par, los agentes ministeriales iniciaron la correspondiente investigación para tratar de identificar al finado y determinar los móviles de su homicidio.
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