GUADALAJARA, JAL.- Por su presunta participación en el asalto a una sucursal bancaria de Banorte, fueron consignados dos individuos, a quienes se les identificó a través de las cámaras de circuito cerrado de la institución asaltada.
Los indiciados fueron puestos a disposición del juez Primero de lo Criminal.
Se trata de Fernando Asencio Arvizu, de 38 años, de oficio taquero y quien vive en la calle Los Naranjos, fraccionamiento Puesta del Sol, en Ixtlahuacán de los Membrillos, y su cómplice Gabriel Rojas García, quien también utiliza el nombre de Iván Gutiérrez Morales, de 35 años, dedicado a la venta de ropa en pacas y con domicilio en la calle 36, colonia Olímpica, en Guadalajara.
Las investigaciones de robo a instituciones bancarias llevaron a ubicar a los dos detenidos, quienes aparecen en videos de sucursales atracadas.
El día 29 de noviembre fueron detenidos y arraigados mediante orden emitida por el juez Sexto de lo Criminal.
Al momento de su detención, a los sujetos se les aseguró un revolver calibre 38 y un arma calibre 9 milímetros. Ambas fueron usadas en los atracos.
El robo por el que fueron consignados es el de un Banorte, ocurrido el 21 de agosto de 2012 ubicado en la avenida Mariano Otero, casi al cruce con la avenida de Las Rosas, en Guadalajara.
Asencio Arvizu declaró que la forma de operar era que llegaban a una sucursal que careciera de las suficientes medidas de seguridad, a donde ingresaba, amagaba a los empleados y los despojaba del dinero que tuvieran a la mano.
Por medio de las imágenes del circuito cerrado de los bancos, agentes investigadores lograron identificarlos y mediante las investigaciones realizadas por el personal de la Fiscalía General se logró dar con su paradero.
Fernando Asencio admitió que en ocasiones se alternaba con Rojas García, pues él se quedaba en la puerta para vigilar que no llegaran policías, mientras que su cómplice llevaba a cabo el atraco.
Los sujetos manifestaron en sus declaraciones ministeriales que el dinero que obtenían en los robos se lo repartían en partes iguales.
Por tal motivo, quedaron bajo arraigo, hasta que se les cumplimentó una orden de aprehensión por el delito de robo calificado.
El Ministerio Público continúa investigándolos e integrando las averiguaciones de otros atracos similares.
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