LAS PALMAS, FRESNILLO.- Lamentable accidente sufrieron elementos del Ejército Mexicano que se dirigían de Oaxaca a Torreón tras volcarse el camión en que viajaban, con un saldo de dos muertos y 22 lesionados, algunos de gravedad.
La tragedia ocurrió alrededor de las 12:35 horas sobre la carretera federal 45 México-Ciudad Juárez, tramo Fresnillo-Las Palmas.
Los soldados viajaban en un camión Mercedes Benz, que quedó atravesado sobre la cinta asfáltica totalmente volcado, recostado sobre su toldo. Tras el percance, las pertenencias de los militares quedaron regadas al igual que todo su equipamiento.
Hasta el momento no se han podido determinar las causas que originaron el fatal accidente.
Tras la volcadura, los sobrevivientes pidieron ayuda, por lo que al lugar acudieron paramédicos de la Red de Emergencias Médicas de Zacatecas (REMEZA), de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM), de la Cruz Roja, así como de Protección Civil de Río Grande, Sain Alto, Cañitas, Juan Aldama y Fresnillo.
Los técnicos en urgencias médicas les brindaron los primeros auxilios a los heridos y luego los trasladaron a diferentes hospitales en El Mineral para su pronta atención, por lo que los soldados quedaron internados en el IMSS, en el Hospital General y en el Hospital Real de Minas.
Trascendió que uno de los soldados murió en el lugar tras el percance, mientras que el segundo perdió la vida cuando era atendido en un nosocomio.
Enterado de la tragedia de los militares, el secretario de Seguridad Pública (SSP), Jesús Pinto Ortiz, se trasladó al lugar en el helicóptero de la SSP para trasladar a los lesionados más graves en él, pero ya todos habían sido atendidos.
Aún así, Pinto Ortiz permaneció en el lugar para apoyar en las labores al resto de las corporaciones que trabajaban en el lugar, como las Policías Municipal y Federal, que acordonaron el área ya que el camión volcado obstruía la circulación.
Además, también llegaron militares adscritos al Batallón de Fresnillo, que aún no se inaugura, que comenzaron a recoger todas las pertenencias de sus compañeros, entre ellas el armamento que quedó regado por doquier.
El cuerpo del militar fallecido fue trasladado al Panteón Santa Teresa para que se le practicara la autopsia de ley, una vez que el Ministerio Público dio fe de los hechos.
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