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En la madrugada se llevaron a un joven y a un matrimonio
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Al muchacho, por la tarde, lo trasladaron a su casa para que se
despidiera de su madre ya que, al parecer, “ya se la tenían sentenciada”
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Los esposos resultaron ser dueños de un antro; los sicarios
saquearon su casa pero ahí dejaron a sus hijos
PABELLON DE
ARTEAGA, AGS.- Un grupo de sicarios llevó a cabo un triple “levantón” en este
municipio la madrugada de hoy (jueves primero de septiembre) al privar de su
libertad a un matrimonio y a un joven, a quienes se llevaron a bordo de tres
camionetas.
De manera
extraoficial, NOTICIERO EL CIRCO logró
conocer que, al parecer, los sicarios habían privado de su libertad a otras dos
personas, pero esto no fue confirmado.
Los “levantados”
fueron los esposos Agueda Jezabel Urzua Jiménez y Jesús Núñez Arroyo, vecinos
de la calle Décima de la colonia Popular y César Manuel Urzua Jiménez, vecino
de la comunidad San Luis de Letras, ambos en Pabellón de Arteaga.
A través de
informes obtenidos, se estableció que en punto de las cuatro de la madrugada,
los delincuentes hicieron acto de presencia en la comunidad mencionada a bordo
de tres camionetas tipo Suburban, dos en color negro y la otra en color gris.
Se dirigieron
directamente a la casa de César Manuel, a quien sometieron y sacaron a la
fuerza para luego subirlo a una de las unidades y retirarse a toda velocidad.
Los sicarios se dirigieron
luego a la colonia Popular y se detuvieron frente a la vivienda de los esposos,
que, al parecer, resultaron ser propietarios de un antro.
Los tipos
también ingresaron al inmueble y sorprendieron a los esposos, que estaban
dormidos, a quienes amagaron con armas de fuego cortas y los sacaron de la
finca para subirlos a las camionetas.
Vecinos del
lugar fueron testigos de lo anterior y hubo quienes alcanzaron a escuchar que
los sicarios decían a alguien al interior de las camionetas “recórranse”, por
lo que se presumía que llevaban a otras dos personas privadas de su libertad y
que podrían ser vecinas también de Pabellón de Arteaga.
Aprovechando la
irrupción en la vivienda del matrimonio, los pistoleros se apoderaron de dinero
en efectivo, teléfonos celulares, aparatos electrodomésticos, entre ellos una
pantalla de plasma, y un lote de alhajas.
Cabe mencionar
que en la vivienda se encontraban los hijos de los esposos, a quienes no les
hicieron nada y los dejaron en la casa para luego darse a la fuga.
Posteriormente,
con carácter de extraoficial, se logró conocer que a las cuatro y media de la
tarde, César Manuel fue llevado a su casa por los mismos sicarios que lo
“levantaron” para que se despidiera de su madre, tras de lo cual se volvieron a
retirar.
Se dijo que
César Manuel “ya la tenía sentenciada” y que, probablemente, iba a ser
ejecutado, por lo que su última voluntad habría sido despedirse de su madre, lo
cual le fue concedido.
Sin embargo,
hasta el momento de redactar estas líneas, ya no se volvió a saber nada de los
“levantados” ni de la suerte que corrieron.
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