PABELLÓN DE ARTEAGA, AGS.- Dos muertos dejó como saldo el espantoso accidente ocurrido sobre la carretera 45 Norte el pasado lunes 21 de enero al mediodía, luego de que un flamante automóvil Mini-Cooper que era desplazado a exceso de velocidad, abandonó la cinta asfáltica y se volcó de manera impresionante hasta quedar totalmente destrozado.
En el sitio falleció un auxiliar administrativo de la Unidad de Medicina Familiar número 2 de Rincón de Romos, mientras que en el Hospital Miguel Hidalgo dejó de existir un médico general de la misma, hacia donde se dirigían al momento de los hechos.
Las víctimas resultaron ser el auxiliar administrativo Jesús Estrada Martínez, de 32 años de edad y con último domicilio en la calle Síndicos número 222 del fraccionamiento Ojocaliente IV y/o Municipio Libre, y el médico general Carlos Alberto Cornejo Tiscareño, que contaba también con 32 años y vivió en la calle Félix de la Paz número 707 de la colonia Gremial.
El Mini-Cooper en que viajaban era en color rojo y con placas de circulación AEL-11-73, propiedad del galeno, que era el que lo conducía y el cual quedó totalmente destrozado.
La volcadura ocurrió alrededor de las 12:45 horas sobre el kilómetro 26+400 de la Panamericana Norte, a la altura de la comunidad Emiliano Zapata, perteneciente a este municipio.
El director del turno vespertino de dicha Unidad de Medicina Familiar número 2, Héctor Fernando Chaires Ojeda, de 35 años, se presentó en el sitio e identificó a los accidentados.
Carlos Alberto y Jesús entraban a trabajar a la una de la tarde a la Unidad de Medicina Familiar en Rincón de Romos, por lo que al accidentarse se dirigían a dicho lugar.
Testigos de lo sucedido dijeron que el Mini-Cooper era guiado en dirección de sur a norte a una velocidad de más de 140 kilómetros por hora y que su conductor iba rebasando varias unidades de motor, pero en una curva, tras un puente peatonal, perdió el control del volante hacia el lado derecho.
El automóvil de lujo abandonó la carpeta de asfalto y por la velocidad que llevaba se volcó en forma impresionante.
La unidad dio varias volteretas y en una de ellas Jesús salió disparado de la cabina, quedando tirado en el piso, boca abajo, gravemente herido.
El coche siguió avanzando alrededor de 30 metros más hasta que finalmente se detuvo, quedando recostado sobre su lado izquierdo, aunque totalmente deshecho.
Fue tal la magnitud del percance, que se le desprendió una llanta, que quedó al pie de la carretera, y hasta el motor, que fue proyectado a, por lo menos, 30 metros de distancia.
El cuerpo del médico también salió volando del auto y quedó cerca del motor, igualmente con lesiones de gravedad.
Los automovilistas que presenciaron la volcadura la reportaron a las autoridades y al sitio acudieron policías municipales pabellonenses y policías federales, para tomar conocimiento del accidente.
También llegaron paramédicos del ISSEA en las ambulancias ECO-162 y ECO-171, a cargo de Patricia Rodríguez y Raymundo González, que revisaron a los dos individuos y confirmaron que Jesús ya había fallecido.
A Carlos Alberto lo encontraron vivo, por lo que lo auxiliaron y de urgencia lo canalizaron al Hospital Miguel Hidalgo, donde minutos después también dejó de existir.
El cuerpo de Jesús quedó a aproximadamente 10 metros de la carretera y a su alrededor quedaron regados muchos documentos y recetas del Instituto Mexicano del Seguro Social, además de varias partes del Mini-Cooper destrozado.
El Ministerio Público dio fe de la muerte del auxiliar administrativo en el lugar del percance y luego de la del médico en el nosocomio de la calle Galeana, encargándose elementos de Servicios Periciales de trasladar sus cuerpos al SEMEFO, mientras agentes ministeriales del grupo Homicidios realizaban las primeras investigaciones del caso.
como le ago para ver paginas actuales y anteriores
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