TRES “ZETAS” SALIAN DEL PENAL DE PUENTE GRANDE DESPUES DE CUMPLIR SENTENCIA Y LOS REAPREHENDEN POR OTRO DELITO

Agentes de la Procuraduría de Justicia del Estado

Los tres fueron capturados en julio del 2009, tras dos enfrentamientos en Mezquitic  y ahora deberán ser juzgados por el delito de homicidio calificado en grado de tentativa. Ellos son:

Sergio Mauricio Santoyo Rosas, apodado "El Pelón", de 24 años; oriundo y vecino de San Luis Potosí, con domicilio en el andador Sabín, en la colonia Nuevo Progreso,

José Rogelio Mata Mendoza, de 27, con domicilio en la calle 71, en Plaza Ciudad 2000, en San Luis Potosí, de donde también es originario, y

Jorge Ezequiel Martínez Pantoja, alias "El Jorgillo, de 23, vecino de la primera privada de Constitución, en la colonia Julián Carrillo, en San Luis Potosí.

Su captura se realizó el 25 de julio de 2009, en un operativo en el que participaron la Procuraduría de Justicia del Estado, la Secretaría de Seguridad Pública de Jalisco así como las policías municipales de Mezquitic, Colotlán y Huejuquilla El Alto.

En esa fecha los sujetos presuntamente se dirigían a recibir y resguardar un cargamento de marihuana y circulaban en dos camionetas: una Durango color tinto y una Ram de color negro, en compañía de otros individuos procedentes de la ciudad de Fresnillo, Zacatecas.

Al transitar por el camino que conduce a Los Amoles, en la Sierra Huichola dentro del territorio de Mezquitic, se percataron de la presencia de elementos de la policía municipal de dicha localidad, por lo que abrieron fuego contra ellos y amagaron con lanzarles una granada de fragmentación, pero enseguida se dieron a la fuga.

Entonces se implementó un operativo en el que participaron agentes de la Procuraduría de Justicia del Estado, elementos de la Policía Rural, así como agentes municipales de Colotlán y Huejuquilla El Alto.

Poco después, en el rancho Jimulco, se logró ubicar a los tres ahora detenidos, quienes se hallaban escondidos en el corral de una casa, y de nueva cuenta atacaron a balazos a los policías, suscitándose otro enfrentamiento.

Finalmente los presuntos criminales fueron sometidos por los agentes policiacos y se les aseguraron dos pistolas calibre 9 milímetros; una calibre .38 súper; una granada de fragmentación y una camioneta Dodge Durango, con placas del estado de Texas.

Los sujetos dijeron que actuaron de tal forma, porque habían sido contratados como "halcones", es decir tenían la función de vigilar los movimientos policiacos de las diversas corporaciones.

Asimismo, explicaron que les habían asignado la custodia y traslado de una carga de marihuana, que iban a recoger en un lugar que no pudieron precisar, pues aseguraron que uno de sus cómplices que huyó -aparentemente herido de bala-, era el que sabía la ubicación.

En esa ocasión los detenidos fueron consignados al Ministerio Público de la Federación por la portación de armas de fuego de uso exclusivo del Ejército,  posesión de cartuchos y de una granada de fragmentación.

Recientemente los sujetos obtuvieron su libertad tras cumplir una pena de 2 años 8 meses, por los delitos del fuero federal, pero al salir de Puente Grande fueron reaprehendidos por agentes de la división de mandamientos judiciales de la Procuraduría del Estado.

En su contra el Ministerio Público había obtenido una orden de aprehensión por su presunta responsabilidad en delitos cometidos contra representantes de la autoridad y homicidio calificado en grado de tentativa, dictada por el Juez Mixto de Primera Instancia de Colotlán y que corresponden a los hechos en los que se enfrentaron a los policías al ser detenidos en julio del 2009.

detuvieron a tres sujetos que tras haber sido detenidos por delitos del fuero federal salieron del penal de Puente Grande, pero tenían cuentas pendientes por hechos del fuero común.