El depravado fue identificado como Leovigildo Casillas Casillas, de 44 años, que tras su arresto argumentó que se metía a las casas ajenas debido a que las ofendidas eran prostitutas, aunque pese a ello fue puesto tras las rejas.
El lunes, minutos antes de las 9 de la mañana, se introdujo a una vivienda de la calle Juan Douglas de la colonia mencionada, y pretendió ultrajar sexualmente a una joven de 26 años, aunque no lo logró debido a que ella opuso resistencia.
Al ver frustrado su ataque, Leovigildo ocasionó daños en el interior de la casa y amenazó e insultó a la víctima, que lo reportó a las autoridades a través de los servicios de emergencia.
Los elementos de la Policía Preventiva se trasladaron de inmediato al lugar y detuvieron al sospechoso. Ya lo subían a una patrulla cuando se acercó otra mujer con su hija de 14 años de edad y lo acusó de que a la adolescente le hizo tocamientos obscenos en su cuerpo después de que se metió sin permiso a su domicilio.
En base a tan delicadas acusaciones, el sujeto fue trasladado a la Policía Ministerial y presentado ante el Ministerio Público para las investigaciones correspondientes.
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