25 de enero de 2012

PEPENADOR ES EL 6º. SUICIDA DEL AÑO

EL AÑO PASADO PROMEDIARON POCO MÁS DE 8.16 POR MES…

  • El pepenador tenía 20 años de drogarse con marihuana, "Chemo" y pastillas psicotrópicas, preocupada la madre, la noche del pasado lunes, le pidió que ya dejara de drogarse ya que tenía miedo de que le fuera a pasar algo, pero no le contestó nada.



AGUASCALIENTES, AGS.- Un pepenador de 39 años, protagonizo y consumó el sexto suicidio del año la tarde de ayer en la colonia Barranca de Guadalupe, al poniente de la ciudad, que se ahorcó en el patio de su casa.
Lo hizo aprovechando que no estaba alguien con él y debido, aparentemente, a que era adicto a las drogas.
Lamentablemente, su madre lo descubrió y descolgó, pero ya había dejado de existir.
Fue identificado como José Alfredo Pérez Pérez, era soltero y fue vecino de la calle Nogal número 504 de la mencionada colonia.
Fue hijo de Socorro Pérez Tiscareño, de 62 años, con quien vivió.
En la planta alta del mismo inmueble habitaba su hermano Enrique, de 37 años, que no se dio cuenta de la tragedia.
Ayer, alrededor de las 06:30 horas, José Alfredo salió de su casa para ir a pepenar y regresó a la una y media de la tarde.
Instantes después llegó a buscarlo su amigo Ricardo "N" (a) "El Rucha" o "El Trucha", con quien se retiró.
En punto de las tres de la tarde, la sexagenaria salió de la casa y cerró la puerta debido a que su vástago no había regresado, pero poco después volvió con su amigo y se introdujeron a su cuarto.
Casi al mismo tiempo, Enrique llegó a la vivienda procedente de su trabajo y subió a su habitación.
Al asomarse por el balcón, observó al tal "Rucha" salir del inmueble con un envase de cerveza caguama, ir a la tienda y regresar, sospechando que estaba tomando con su hermano José Alfredo, por lo que no le dio importancia.
Enrique se introdujo a su vivienda y se dispuso a jugar con unos videojuegos.
Mientras tanto, el pepenador se quitaba la vida.
Se presumió que "El Rucha" se retiró del domicilio y que esto lo aprovechó José Alfredo para salir al patio y ahorcarse, amarrando un extremo de un mecate amarillo a su cuello y a un barandal colocado en la azotea de la finca.
Alrededor de las cuatro y media de la tarde Socorro regresó a su casa y al ingresar descubrió a su hijo colgado, por lo que le tocó la cara y al sentirle una temperatura normal, decidió bajarlo, cortando el lazo con un cuchillo de cocina.
Lo acostó en el piso y al darse cuenta que Enrique estaba en la planta alta le gritó para que bajara, tras de lo cual ella misma fue con un vecino para pedirle ayuda, comunicándose a los servicios de emergencia.
Al domicilio acudieron poco después policías preventivos y paramédicos, que revisaron a José Alfredo y confirmaron que ya no presentaba signos vitales, por lo que lo declararon muerto.
Enterado de lo sucedido, el Ministerio Público acudió al lugar para dar fe de los hechos, tras de lo cual el cuerpo del pepenador fue trasladado al Servicio Médico Forense y una vez que se le practicó la autopsia de ley se determinó que murió de una insuficiencia respiratoria aguda consecutivo a asfixia por ahorcamiento.

4 comentarios :

  1. apenas ya no va a batallar su mama con el fue lo mejor

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  2. QUE DIOS LO TENGA DONDE NO SE VENGA

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  3. pues eso es lo que le pasa a los drogadictos mira pobresito yo lo hubiera ayudado con mis poderes sanadores benignos del bien, lo hubiera invitado a fumar pastito

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  4. ha nadie les gustaria que al guno de sus hijos muriera asi por muy drogadicto que fuera

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