- Un juez penal le dictó el auto de formal prisión por homicidio doloso calificado con premeditación, alevosía, ventaja, traición y brutal ferocidad
AGUASCALIENTES, AGS.- Comenzó el proceso en contra del desquiciado promotor de una empresa refresquera que asesinó de 29 puñaladas a su amante, cajera de una tienda de auto-servicio, tras descubrir que no estaba embarazada como le había hecho creer y porque, al mandarle mensajes a su teléfono celular, le causó problemas con su esposa, que acababa de dar a luz a su tercer hijo.
El juez Cuarto Penal le dictó el auto de formal prisión por el delito de homicidio doloso calificado con premeditación, alevosía, ventaja, traición y brutal ferocidad, negándole el beneficio de la libertad bajo caución, por lo que permanecerá recluido en el CERESO Aguascalientes todo el juicio.
El brutal asesinato ocurrió la mañana del jueves 13 de marzo en el domicilio de la víctima en el fraccionamiento Cartagena y al día siguiente el presunto homicida fue detenido por agentes de la Policía Ministerial en calles de la zona centro.
El acusado es David Mendoza Galdámez, de 28 años y con domicilio en la calle Paseos del Puertecito Oriente del fraccionamiento Villas del Río.
A quien asesinó es a Elizabeth Aguilar Zamora, que contaba con 42 años de edad y vivió en la calle Polín Aguilar número 207-B del fraccionamiento Cartagena, quien se había separado de su esposo, que se quedó a vivir con sus dos hijas de 17 y 14 años de edad.
Las autoridades ministeriales informaron que se conocieron hacía 5 meses en una tienda de auto-servicio ubicada en la comunidad El Puertecito de la Virgen, donde ella laboraba como cajera y él como promotor de la refresquera, por lo que iniciaron una relación sentimental y tuvieron varios encuentros íntimos.
David le dijo a Elizabeth que era divorciado, pero resultó ser una mentira ya que seguía casado y de hecho en fecha reciente su esposa dio a luz a su tercer hijo.
Los compañeros de Elizabeth se dieron cuenta de su amorío con David.
Tras el nacimiento de su hijo, David empezó a tener problemas económicos, platicándole a su esposa que conocía a una persona (Elizabeth) que le podría prestar dinero para solventar sus compromisos, aunque lógicamente no le confesó de su relación sentimental con ella.
David le pidió a Elizabeth que le prestara 5 mil pesos, pero sólo le entregó mil, diciéndole que luego le daría el resto, lo cual se lo platicó a su cónyuge.
Días después, la mujer le preguntó a David qué había pasado con el resto del dinero que le prestarían, a lo que le contestó que no sabía ya que lo cambiaron de tienda y no había podido ver a la señora que se lo facilitaría (Elizabeth).
La relación entre los amantes se complicó, ya que Elizabeth descubrió que David no estaba divorciado como le había hecho creer, además de que ella le aseguró que estaba embarazada, aunque no era verdad.
Al saber lo del supuesto embarazo, David se enojó y le reclamó a Elizabeth, tras de lo cual empezaron a distanciarse.
Por tal motivo, la cajera comenzó a mandarle mensajes a su teléfono celular, los cuales fueron descubiertos por la esposa de David, que le preguntó qué pasaba, diciéndole que la mujer que le había prestado el dinero le estaba diciendo que si quería el resto de los 5 mil pesos tendría que sostener relaciones sexuales con ella.
Elizabeth siguió mandándole mensajes a David, algunos de ellos amenazadores, que fueron vistos por su esposa, por lo que le recomendó que le pagara el dinero que les prestó para que se dejara de problemas.
Debido a lo anterior, David decidió "arreglar las cosas" y la mañana del jueves 13 de marzo decidió ir a la casa de Elizabeth.
De su casa salió más temprano que de costumbre, inventándole a su esposa que sus jefes pasarían a revisar y tenía que llegar antes a su trabajo, pero en realidad se trasladó al domicilio de su amante, llevando consigo un cuchillo, que guardó en una bolsa de su pantalón.
Al estar con Elizabeth, le exigió que ya lo dejara en paz y que había descubierto que era mentira que estuviera embarazada, por lo que ella se le fue encima y le dio dos bofetadas.
Ante esto, David se enojó y la aventó contra una pared, provocando que cayera al piso, lo que aprovechó para sacar el cuchillo y apuñalarla hasta en 29 ocasiones en todo el cuerpo para asesinarla.
Al ver que su amante ya no se movía, David trató de limpiar la sangre con un trapo y cloro, tras de lo cual salió de la casa y se fue a trabajar como si nada, pero luego le llamó a su esposa para decirle lo que había pasado y que no regresaría a su casa.
El mismo jueves, alrededor de las 11:148 horas, el cuerpo de la mujer fue descubierto por sus hijas, que fueron a visitarla, por lo que avisaron a sus familiares y a las autoridades.
El cuerpo de la cajera fue localizado en el cuarto del fondo de su casa, sobre unas cobijas, además de que en todo el domicilio se encontraron manchas de sangre.
En su teléfono celular se le encontraron mensajes con amenazas de muerte por parte de su ex esposo así como del tal David, en los que, presuntamente, le exigía que abortara al bebé que estaba esperando para que su familia no se diera cuenta de su embarazo, aunque ella le decía que no, ya que sería mamá y papá a la vez.
Al comenzar las investigaciones, los agentes ministeriales descubrieron que Elizabeth tenía una relación amorosa con un sujeto que trabajaba en la misma tienda de auto-servicio, al cual identificaron y lograron conocer su domicilio, por lo que fueron a buscarlo.
Los elementos fueron recibidos por su esposa, que les dijo que no estaba y les proporcionó una fotografía de él, indicándoles que acostumbraba ir a un billar ubicado en la zona centro.
Los investigadores se dieron a la tarea de localizarlo y el viernes 14 lo localizaron y arrestaron sobre la avenida Zaragoza casi esquina con 5 de Mayo, por lo que lo arrestaron.
Al verse descubierto, David aceptó haber asesinado a Elizabeth a puñaladas, por lo que les ofreció 5 mil pesos a cambio de que lo dejaran ir, entregándoles 200 pesos y pidiéndoles que lo llevaran a su casa para darles el resto.
Los agentes aceptaron el dinero para poderlo acusar de cohecho y al revisarlo, entre sus pertenencias le hallaron una bolsa con marihuana.
David fue presentado ante el Ministerio Público y luego consignado ante el juez penal, que ya lo declaró formalmente preso por el asesinato de la cajera.
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