AGUASCALIENTES, AGS.- Una joven fue asesinada asfixiada en el interior de su domicilio, en el oriente de la capital.
Su esposo, con el que constantemente tenía peleas, se convirtió en el principal sospechoso del homicidio, por lo que fue detenido por policías preventivos y entregado a las autoridades ministeriales para las investigaciones correspondientes.
La víctima mortal respondió al nombre de Mariana Anguiano López, que contaba con 29 años de edad y era madre de un bebé.
El sospechoso fue identificado como José Luis Martínez Gutiérrez, de 26 años.
El asesinato se consumó en una casa de la calle Cultura Tlaxcalteca del fraccionamiento Mirador de las Culturas, que era habitada por la pareja.
El martes 4 de julio, minutos después de la una de la tarde, en el servicio de emergencias 911 se recibió un reporte hecho por el propio José Luis, que señalaba que había encontrado a su esposa inconsciente dentro de su vivienda.
Por tal motivo, de inmediato se trasladaron al lugar elementos de las Secretarías de Seguridad Pública Municipal y Estatal, además de paramédicos del cuerpo de Bomberos Municipales en la ambulancia UE-06.
A su arribo, el joven les explicó que su cónyuge estaba acostada en la cama y sobre ella unas almohadas, por lo que los técnicos en urgencias médicas ingresaron para revisarla, pero al hacerlo constataron que ya no presentaba signos vitales, declarándola muerta.
Los uniformados procedieron a acordonar el lugar de los hechos para no permitir el ingreso de nadie más al escenario.
Al interrogar a José Luis sobre lo sucedido, les dijo que por la mañana salió de su domicilio para ir a trabajar a una mueblería, pero que no discutió con Mariana y aún estaba con vida.
Comentó que poco después del mediodía regresó en el horario que le dan para ir a comer y al ingresar a la casa la encontró acostada en la cama, por lo que trató de despertarla, pero al no conseguirlo solicitó ayuda.
Los oficiales detectaron algunas huellas de violencia en la víctima, además de que fueron enterados por los vecinos de la pareja que constantemente tenía discusiones.
Los habitantes de la calle les indicaron que la noche del lunes 3 escucharon a los esposos discutir, por lo que incluso llamaron al servicio de emergencias 911 para reportar tal situación.
Ante esto, los uniformados procedieron a asegurar a José Luis, ante la sospecha de que él pudo haber asesinado a su pareja debido a las frecuentes peleas que tenían.
Al lugar de los hechos llegaron poco después agentes de la Comisaría de la Policía Ministerial y elementos de la Dirección de Investigación Pericial para realizar las primeras pesquisas.
En ese mismo punto, los policías ministeriales entrevistaron a José Luis, que les narró la forma en la que descubrió a su esposa, tras de lo cual fue llevado a la Fiscalía General del Estado a disposición del agente del Ministerio Público.
Dentro de la casa se realizaron varias diligencias y aseguraron algunas evidencias, tras de lo cual el cuerpo de la mujer fue conducido al Servicio Médico Forense para la práctica de la autopsia, presumiéndose que murió asfixiada.
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