AGUASCALIENTES, AGS.- Los tres sujetos que ejecutaron a balazos a otro el pasado fin de semana en el oriente citadino, dejaron un narco-mensaje en el lugar de la agresión antes de darse a la fuga a bordo de un automóvil.
El ejecutado fue identificado como Jaime Alejandro Arias Martínez, que contaba con 40 años de edad.
El atentado en su contra sucedió el domingo 14 de mayo, alrededor de las 00:31 horas, en la avenida Pensadores Mexicanos y la calle Cultura Otomí del fraccionamiento Palomino Dena.
Jaime Alejandro llegaba a su casa, ubicada en ese punto, a bordo de una camioneta Chevrolet Blazer, color verde, modelo 1997 y con placas de circulación de Aguascalientes, pero ya lo estaban esperando los tres tipos a bordo de un auto Volkswagen Jetta gris, uno de los cuales le disparó hasta en ocho ocasiones con una pistola escuadra calibre 9 milímetros.
El agredido recibió dos impactos de bala, en una mano y en el antebrazo izquierdo, casi a la altura del hombro.
Tras la agresión, los sujetos dejaron un narco-mensaje escrito en una cartulina en color blanco y con letras mayúsculas en tinta negra que decía: "ESTO LE PASA A TODA LA GENTE DE RUBÉN JIMÉNEZ ENRÍQUEZ ALIAS: "RUBIO O R1" QUE MANDA DESDE EL PENAL A HACER SUS MAMADAS COMO EXTORSIONAR".
La concubina de Jaime Alejandro se encontraba dentro de su casa y al escuchar los disparos salió de inmediato y lo vio herido a bordo de la camioneta, por lo que subió a la unidad y lo trasladó a recibir atención a la Clínica México-Franco-Brasileña, pero llegó ya sin vida, ya que, al parecer, la bala que le ingresó por el antebrazo izquierdo le afectó órganos vitales y esto le costó la existencia.
Tras lo anterior, las autoridades ministeriales aseguraron el narco-mensaje y los casquillos percutidos.
"El Rubio" y/o "El R1" actualmente se encuentra recluido en el CEFERESO de Hermosillo, Sonora, acusado por los delitos de secuestro y delincuencia organizada.
Fue detenido en el 2013 en León, Guanajuato, por agentes ministeriales de Aguascalientes tras ser señalado como "jefe de plaza" de "La Familia Michoacana" que operaba en esta entidad.
Además, a Rubén Jiménez Enríquez se le relacionaba con una "casa de seguridad" ubicada en el Barrio de la Purísima, donde las autoridades ministeriales encontraron propaganda política.
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